
Cuidar de nuestra salud es responsabilidad de todos, tanto de los hombres como de las mujeres, aunque en el caso de estas últimas, por desgracia, no siempre es así. Los hombres suelen descuidar las enfermedades y otras dolencias que les afectan, lo que tiene más consecuencias, y los efectos de su descuido suelen ser trágicos. Un hombre, especialmente en su edad media y avanzada, puede padecer muchas enfermedades, que afectan a diversos sistemas y órganos del cuerpo, y las consecuencias de su descuido suelen ser trágicas.y órganos del cuerpo, y uno de ellos son los problemas con la próstata, también llamada glándula prostática o pródromo.
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Causas del deterioro de la salud en los hombres
Reconozcámoslo, la mayoría de los hombres ni siquiera intentan cuidar su salud como es debido. No sólo hacen caso a las enfermedades, que por lo general ni siquiera quieren tratar, sino también a las recomendaciones de los médicos o dietistas sobre los cambios en el estilo de vida actual. Desgraciadamente, esto se puede ver en las estadísticas de mortalidad que, aunque han mejorado algo recientemente, siguen mostrando que los hombres viven menos que el sexo opuesto.
En la gran mayoría de los casos, ellos mismos son los culpables de ello, y las omisiones más comunes que lo provocan son
- Dieta inadecuada, sobre la que ya se han escrito volúmenes enteros en el caso de los caballeros. La mayoría, sin embargo, nunca admitirá que lo que come está muy lejos de las directrices de los nutricionistas, lleno de grasas trans poco saludables, colesterol, conservantes y cantidades gigantescas de azúcar y sal. Al mismo tiempo, carece de nutrientes, vitaminas y minerales clave, incluidos los especialmente recomendados para los hombres. Todo ello provoca sobrepeso o incluso obesidad patológica, enfermedades del corazón y del sistema circulatorio, prostatitis bacteriana o hipertrofia de la próstata. Tiene un impacto negativo casi inmediato en la potencia, dificultando la consecución y el mantenimiento de una erección normal y firme;
- El estilo de vida sedentario, a pesar de que la actividad física es uno de los fundamentos de la conservación de la salud a largo plazo y de la plena eficacia sexual. La falta de ejercicio también se convierte en la causa de un rápido aumento de peso y de enfermedades cardiovasculares, especialmente de la hipertensión y la aterosclerosis, que ponen en peligro la vida;
- el alcohol y el tabaco, dos estimulantes que arruinan casi por completo no sólo la salud de los hombres, sino que los efectos de su abuso también se dejan sentir en la próstata.
Qué es la próstata

Antes de responder a la pregunta de cómo cuidar la próstata, debemos saber qué es realmente la glándula prostática y qué funciones importantes desempeña en el organismo. La próstata es una glándula que se encuentra exclusivamente en el sistema genitourinario masculino, cuyo crecimiento viene determinado por el nivel adecuado de testosterona, y que está formada por dos lóbulos conectados por el llamado ganglio. Se encuentra en la parte inferior de la pelvis, debajo de la vejiga, rodea la uretra y con su parte posterior toca la zona del recto.
Aunque sólo tiene el tamaño de un fruto de castaña, 3,5 cm de largo, 2,5 cm de alto y unos 4 cm de ancho, no se puede subestimar su importancia. Entre otras cosas, es responsable de la fertilidad, al producir el líquido seminal en el que se mueven los espermatozoides. Su segunda función importante es la de permitir la eyaculación, es decir, controlar el trabajo de los músculos lisos que la determinan.
Enfermedades de la glándula prostática
La glándula prostática se desarrolla a lo largo de la vida del hombre, alcanzando su mayor capacidad alrededor de los 30 años, pero con el tiempo su actividad comienza a disminuir. Los hombres de mediana edad, en torno a los 45-50 años, tienen que contar con su aumento, que no deja de influir en la salud y la condición sexual posteriores.
Hipertrofia de la próstata
Lahipertrofia prostática es el principal y más común trastorno de la próstata, que, según las estadísticas oficiales, afecta ya a casi el 50 por ciento de los hombres mayores de 60 años, y en los hombres mayores, entre 70 y 80 años, el número de casos diagnosticados supera incluso el 80 por ciento. La causa del desarrollo de esta enfermedad es la disminución de los niveles de testosterona, que también progresa con la edad, provocando el crecimiento del tejido glandular, y sus síntomas característicos y más comunes son:
- micción frecuente, necesidad de orinar varias veces más, no sólo durante el día sino también por la noche, lo que perturba el descanso e impide la regeneración;
- Chorro de orina intermitente y débil que demuestra que el agrandamiento de la próstata presiona la uretra provocando su progresivo estrechamiento;
- una incómoda sensación de presión continua sobre la vejiga, incluso cuando está vacía;
- la formación de cálculos en el sistema urinario, provocada por la dificultad para vaciar la vejiga, que si no se trata adecuadamente puede acabar incluso en una infección urinaria o en una insuficiencia renal aguda;
- incontinencia embarazosa y sangre en la orina, que pueden ser signos de desarrollo de la inflamación.
Cáncer de próstata
Eldescuido y la falta de control de la salud de su glándula prostática pueden conducir no sólo a la hipertrofia de la próstata, sino también a un cáncer de próstata especialmente grave. El riesgo de contraer la enfermedad también aumenta con la edad del hombre, pero las causas son variadas y pueden ser aceleradas por los siguientes patógenos:
- la mencionada mala dieta, en la que predominan los productos altamente procesados, grandes cantidades de carne roja, grasas saturadas, y carece a su vez de vitaminas C y E, que son antioxidantes que eliminan los radicales libres cancerígenos del organismo;
- La susceptibilidad genética, no tanto heredarla de la generación más antigua de la familia, sino que si el padre o el abuelo tuvieron cáncer de próstata en el pasado, el hijo o el nieto también deben tenerlo en cuenta. Es mucho más probable que tengan la mutación del gen BRCA1 responsable de ello;
- edad, y los hombres mayores de 40 años están en riesgo. También conviene recordar que no es una enfermedad de los más jóvenes, que prácticamente no la padecen;
- raza, y los estudios han demostrado que el cáncer de próstata es mucho más frecuente en los negros de África y América que en los europeos o asiáticos.
Los síntomas del cáncer de próstata crecen gradualmente, al principio no son muy perceptibles, pero una fuerte presión en la vejiga, el dolor al orinar o la dificultad para vaciar la vejiga ya deberían despertar la preocupación. Por supuesto, no hay que asustarse de inmediato, hay que seguir observando el cuerpo y acudir al médico cuando haya otros síntomas que puedan indicar el desarrollo de la enfermedad:
- Micción frecuente, similar a la hipertrofia de próstata;
- la aparición de sangre en la orina y en el esperma;
- Dolor intenso en el perineo, que dificulta los movimientos;
- dolor durante la eyaculación;
- la disfunción eréctil;
- estancamiento de la orina en la vejiga, lo que provoca insuficiencia renal o cálculos;
- dolor de espalda, especialmente en la región lumbar de la columna vertebral, y lumbalgia;
- La presión sobre la médula espinal, que se produce cuando el cáncer ha hecho metástasis en la columna vertebral, afectando a la sensibilidad de los miembros inferiores;
- Hinchazón de las piernas como consecuencia de la propagación de las células cancerosas y la presión sobre el torrente sanguíneo y los ganglios linfáticos.
Cómo cuidar la próstata: los mejores métodos probados

Ahora que conocemos los graves riesgos de las posibles enfermedades de la glándula prostática, es el momento de saber cómo cuidar la próstata para evitarlas eficazmente. Hay muchos métodos, más o menos eficaces, que merecen la pena, pero lo primero es acudir al médico, porque sólo él puede ordenar las pruebas adecuadas para confirmar o descartar el diagnóstico inicial.
De hecho, se recomiendan a todos los hombres de más de 40 años, pero, como suele ocurrir, la mayoría de ellos descubren las posibles anomalías sólo cuando aparecen los primeros síntomas de las enfermedades descritas anteriormente. En cuanto a su tratamiento y prevención, si no son demasiado graves, vale la pena recurrir a métodos naturales al principio, y sólo cuando resulten ineficaces, recurrir a los productos farmacéuticos. Mantener la próstata sana hasta la vejez sin duda lo facilitará:
Cambiar la dieta
Una dieta equilibrada tiene una influencia beneficiosa para minimizar el riesgo de hipertrofia de próstata y aliviar sus síntomas, si ya hemos desarrollado la enfermedad. Al mismo tiempo, apoyará el tratamiento, sobre todo cuando eliminemos los productos nocivos del mismo:
- altamente procesados, llenos de rellenos artificiales y conservantes, algunos incluso cancerígenos;
- las bebidas gaseosas, especialmente las endulzadas con jarabe de fructosa-glucosa o azúcar refinado;
- Aperitivos poco saludables, por ejemplo, patatas fritas llenas de sal;
- pan y otros productos elaborados con harina de trigo blanco;
- la carne grasa y todos los productos elaborados con ella;
- ciertos tipos de productos lácteos, quesos enteros, mantequilla, yogures grasos y leche desnatada;
- estimulantes, el alcohol mencionado anteriormente, el café fuerte y el té negro fuerte.
En cambio, el menú diario debería incluir:
- grandes cantidades de fruta y verdura, la fuente más rica en vitaminas y otros nutrientes. Las verduras recomendadas son los tomates, los pimientos rojos, las coles de Bruselas, las zanahorias, la col rizada, la col y las espinacas. Las frutas recomendadas para los problemas de próstata son los cítricos, la sandía, las uvas, las frambuesas, las fresas y los aguacates;
- grasas saludables como el aceite de oliva, pero sólo extra virgin virgen extra;
- pescado graso, fuente de valiosos ácidos grasos Omega – 3 y Omega – 6;
- pan y pasta integrales, que aportan la fibra necesaria para una buena digestión;
- arroz integral y trigo sarraceno;
- legumbres, especialmente las judías;
- nueces;
- Té verde, yerba mate, grandes cantidades de agua mineral sin gas.
Más actividad física y sexual
Por supuesto, nadie pretende aquí persuadir a los hombres estables de cincuenta o sesenta años para que practiquen deportes de competición, pero ciertas formas de actividad física son muy recomendables. Los ejercicios de Kegel, los paseos diarios, el nordic walking, la natación, el jogging de ocio y el ciclismo recreativo son eficaces.
Además, no hay que olvidarse de la actividad sexual, incluso con problemas de próstata. Los estudios demuestran que los hombres que mantienen relaciones sexuales con regularidad son menos propensos a padecerla, y su riesgo de hipertrofia prostática se reduce en casi un 30%.
Uso de tratamientos a base de hierbas
Laeficacia de la fitoterapia en el tratamiento y la prevención de diversas enfermedades es indiscutible, y desde hace miles de años se utilizan plantas con propiedades beneficiosas para la salud. Funcionan perfectamente también en el caso de la hiperplasia prostática benigna, llamada BPH (Benign Prostatic Hyperplasia), y hierbas, no sólo exóticas, sino también originarias de nuestros prados o jardines, como:
- Laortiga, con propiedades curativas excepcionalmente amplias, que detienen, por ejemplo, la calvicie, acelerando el crecimiento de nuevos cabellos. Las vitaminas y minerales que contiene también protegen contra el cáncer, las enfermedades cardíacas, contrarrestan la agregación plaquetaria, regulan el metabolismo hormonal, incluidos los niveles de testosterona, y aumentan la calidad del semen;
- Lahierba de sauce de flor pequeña, que crece prácticamente en toda Europa, también en nuestro país, elimina los radicales libres del organismo, cuidando las cantidades adecuadas de hormonas, aliviandoel sauce, que crece prácticamente en toda Europa, también en nuestro país, eliminando los radicales libres del organismo, ocupándose de las cantidades adecuadas de hormonas, aliviando los síntomas que acompañan a la hipertrofia de la próstata, la hinchazón y la inflamación, al mismo tiempo que previene su reaparición
- Lapalma sabal, también conocida como saw palmetto, es otra planta con múltiples usos terapéuticos. Impide la conversión de la testosterona en su variedad perjudicial, la dihidrotestosterona (DHT), que también puede causar hipertrofia de la próstata.
Fuentes:
- https://www.healthline.com/health/prostate-infection
- https://www.healthline.com/health/prostate-cancer-symptoms
- https://www.healthline.com/health/mens-health/bph-vs-prostate-cancer
- https://www.healthline.com/health/enlarged-prostate/prostatitis-and-bph
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